La tendencia a la baja representada en esta gráfica, que se suscitó a raíz de la segunda guerra mundial en términos de desigualdad no representa nada, si los crecimientos mostrados en los últimos años alcanzan puntos máximos en comparativa a los anteriores y que no se logró mantener en bajos niveles.
El debate que se desea abrir aquí es el análisis es el porqué diariamente se escucha que la desigualdad mundial ha disminuido y vemos esta tendencia creciente en países anglosajones, principalmente en Estados Unidos, quien es una de las potencias económicas más poderosas a nivel mundial.
Es cierto que económicamente hablando a raíz de la entrada del capitalismo y la aceptación de la globalización se ocasionaron interdependencias económicas, sociales, culturales, políticas y tecnológicas, mismas que han dado la posibilidad a aquellos países que tienen la capacidad de implementarlas, ventajas competitivas en comparación a otros países, sin dejarlos de lado y permitiéndoles un crecimiento económico si bien no en la misma magnitud, un crecimiento.
En la gráfica notamos una disminución importante en la desigualdad de 1910 a finales de la segunda guerra mundial, sin embargo a partir de los años ochentas notamos un crecimiento ¿a qué se debe? Si bien hablamos de una globalización que pinta muy bien ya que permite apertura económica, conexiones en los mercados, unificación de productos, mayor comunicación, todo pinta perfecto hasta que nos paramos en seco debido a que la desigualdad en países industrializados se ha acentuado.
Y esto debido a que se han sufrido una competencia con países emergentes, donde el costo de la mano de obra es considerablemente inferior. ¿Qué ocasiona? Que las economías avanzadas, mientras tanto, se han especializado en productos de alta intensidad de capital, las cuales requieren de personal altamente calificado. Esto no ha hecho más que acrecentar los rendimientos de los propietarios del capital y de aquellos que tienen un elevado nivel de instrucción y de especialización; vulnerando aún más a los trabajadores no especializados, aumentando las diferencias entre las clases sociales.